Este paseo se realizó con motivo del conocido PLAN RENFE llevado a cabo entre los años 1990 y 2001. Consta con más de 434.000 metros cuadrados, se extiende desde la glorieta de los Almogávares hasta la glorieta de las Tres Culturas, siendo interrumpida solamente por la glorieta Llanos de Pretorio y la avenida Gran Capitán. El arquitecto encargado de este proyecto fue Antonio Javier Peña Amaro.
En este paseo nominado oficialmente Paseo de Córdoba y popularmente conocido también como "Paseo marítimo", el agua juega un papel importante merced a las numerosas fuentes que se construyeron para paliar con su presencia y efecto refrescante, en la medida de lo posible, la ausencia de grandes masas forestales que por la propia estructura de la superficie no eran posibles.
Un estanque en cuatro niveles, salva el desnivel del terreno hacia la zona ajardinada, mientras que hacia el paseo peatonal se alza un marco metálico del que cae una cortina continua de agua hasta el estanque superior.
Red de abastecimiento
Última década del s. XX
Javier Peña Amaro